Paquistán, viejo aliado oriental de los yanquis, vive en carne propia su entrega política a los EE.UU., sufriendo el asesinato de sus civiles a manos de los drones que Obama manda a sobrevolar sobre su territorio, en busca de asesinar extrajudicialmente a supuestos terroristas de Al Qaeda.
Si Bush fue conocido al igual que Obama por sus genocidios causados en afán de agraciar a los intereses financieros-sionistas que dominan Washington, ambos tienen una diferencia macabra; Bush avaló y promocionó Guantánamo, mientras que Obama hizo lo propio con el asesinato extrajudicial de personas sospechadas de terrorismo.
Es decir que Obama, excusándose en la lucha contra el terrorismo, ha generado un mecanismo de acción ilegal y violatorio de derechos similar al de Bush en Guantánamo, pero que va más allá. No solo por la violación al derecho internacional, o a las garantías del debido proceso; si no por el asesinato de montones de civiles a los que conllevan esas cazas de terroristas ordenadas por el premio nobel.
Reporte de Russia Today indica que en la propia Casa Blanca, el premier paquistaní, Nawas Sharif, le exigió a Obama, que EE.UU. deje de atacar a Pakistán con drones.
Igual que la sorpresa iraquí, la sorpresa paquistaní de acercamiento a la influencia persa y alejamiento de Norteamerica, está teniendo avances significativos, lo que genera un peligro para el imperialismo y sobretodo el sionismo; puesto que tal situación no hace más que dar poder a la República Islámica de Irán, nación que se agranda como potencia regional sumamente influyente en el Medio Oriente.
Si Bush fue conocido al igual que Obama por sus genocidios causados en afán de agraciar a los intereses financieros-sionistas que dominan Washington, ambos tienen una diferencia macabra; Bush avaló y promocionó Guantánamo, mientras que Obama hizo lo propio con el asesinato extrajudicial de personas sospechadas de terrorismo.
Es decir que Obama, excusándose en la lucha contra el terrorismo, ha generado un mecanismo de acción ilegal y violatorio de derechos similar al de Bush en Guantánamo, pero que va más allá. No solo por la violación al derecho internacional, o a las garantías del debido proceso; si no por el asesinato de montones de civiles a los que conllevan esas cazas de terroristas ordenadas por el premio nobel.
Reporte de Russia Today indica que en la propia Casa Blanca, el premier paquistaní, Nawas Sharif, le exigió a Obama, que EE.UU. deje de atacar a Pakistán con drones.
Igual que la sorpresa iraquí, la sorpresa paquistaní de acercamiento a la influencia persa y alejamiento de Norteamerica, está teniendo avances significativos, lo que genera un peligro para el imperialismo y sobretodo el sionismo; puesto que tal situación no hace más que dar poder a la República Islámica de Irán, nación que se agranda como potencia regional sumamente influyente en el Medio Oriente.
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