Al igual que en Paquistán y Somalia, aviones no tripulados estadounidenses asesinan civiles en Yemen, producto de la política anti-terrorista ordenada por el premio nobel Obama, cuyo objetivo es eliminar a miembros de Al Qaeda en territorio ajeno, sin someterlos a jurisdicción o autoridad judicial alguna.
Esta política genocida acrecentada fuertemente desde el 2011 por voluntad de Obama ha llevado a una espeluznante tragedia a muchas familias de los países sometidos al citado ultraje yanqui; debido a que producto de esos ataques con drones a presuntos terroristas, han muerto miles de inocentes en nada vinculados con grupos radicales.
En Yemen, según datos de familias damnificadas por el “trabajo” anti-terrorista de Washington, los ataques de EEUU a su país con aviones no tripulados, han dejado al menos 700 muertos. La cifra también es confirmada por activistas de derechos humanos, según lo informa la agencia rusa ITAR-TASS.
En su página web, Russia Today publicó que según testimonios de ciudadanos yemeníes, los ataques de los artefactos gringos son indiscriminados y la población civil se lleva la peor parte.
Fuente: Russia Today.
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